Yo el 8 de Julio del 2010 di a luz por pre clamcia con un peso de 83 kilos, el termino de todas las complicaciones, Salí dela clínica y me dijeron que era normal que estuviera hinchada por este motivo, al paso de los días no bajaba de peso, es ahí que recurro a un médico conocido que decía ser una eminencia, en problemas de exceso de peso, este médico a pesar de mis referencias me dio de tomar glucofarge de 750 para que me ayude a bajar de peso, esta medicina es metformina, y mis antecedentes familiares decían que gran parte de mi familia son diabéticos, hice una dieta extremadamente fuerte y solo baje 1.5 kilos y me moría de hambre, luego deje esta dieta y las pastillas, ya con el embarazo me quede hipertensa, y empecé a subir de peso sin comer casi nada, llegue hasta los 97 kilos y se me atrofio la rodilla, teniendo que ser intervenida de artroscopia, y con el diagnostico que si no bajaba de peso por lo menos 20 kilos no iba a poder caminar del todo bien; todo esto se debido a que mi sistema metabólico con las pastillas de la metformina había cambiado y por herencia y sin querer entre al club de los diabéticos con puntos tan altos con 280 de azúcar en la sangre sin comer, nada de dulce, ni harinas.

Es cuando decido firmemente que mi vida debía volver a ser la misma, andaba mal humorada, me sentía enferma con constantes dolores de cabeza, fastidiada con la pierna, gorda como nunca, sentía que la gente me miraba con pena, mi peso había oscilado siempre entre 55 y 65 kilos en el peor de los caso y ahora me veía comprando ropa XL y no me quedaba nada bien y mi salud decayendo.

El 16 de Setiembre del 2011 decido operarme con la cirugía de la manga gástrica con dos médicos el Dr. Cesar Rodriguez Alegria y Dr. Antonio Lahoud Velaochaga a los que les estoy inmensamente agradecida de devolverme la vida, ya que gozo de muy buena salud, mi azúcar no llega a 90 y mi presión es de 10/6, ahora estoy en 63 kilos, mi vida ha regresado a ser la misma, mi familia está mejor, compro ropa talla estándar, puedo hacer deporte con mi pierna, obviamente moderado, pero suficiente. Soy una persona con mis niveles controlados; y soy muy feliz, porque comparto con mis hijos lo que no podía hacer antes.